BUEN COMIENZO DEL AÑO JUDICIAL EN PIURA: COMBATIENDO LA CORRUPCION

En la anterior entrega de este blog (03 de Enero) publiqué un artículo en el que hacía una reflexión de la necesidad de aplicar penas duras a los delincuentes públicos y refiriéndome al caso de la sentencia programada para el día de ayer (05/01/13) contra el alcalde del distrito ayabaquino de Pacaipampa, manifestaba la necesidad de establecer un buen precedente en este nuevo año. Creo que si bien es cierto no tengo ninguna capacidad para influir sobre los magistrados que vieron el caso, estos actuaron con ponderación y dictaron una buena sentencia que por lo menos pone a buen recaudo a la Municipalidad Distrital de Pacaipampa, ya que el sentenciado alcalde deberá irse a su casa a esperar lo que resuelva la Corte Suprema de Justicia, esperando que confirme la pena o, haciendo eco de la apelación fiscal, la eleve.

A quienes desde la población han estado impulsando la acción de la justicia contra un ciudadano que ha abusado de la confianza que le dispensó la población en su primera elección y que en las posteriores, haciendo uso de artimañas electoreras logró torcer la genuina voluntad popular, es pertinente felicitarles al haber logrado su propósito; sin embargo queda una acción: hay que solicitar a la sala juzgadora que, en forma inmediata, ordene a quien corresponda la inscripción de la inhabilitación impuesta por la sentencia y luego solicitar al Jurado Nacional de Elecciones la suspensión o vacancia del sentenciado.

La otra tarea, es tomar contacto con quien, a partir de la vacancia, ostentará el cargo de alcalde con la finalidad de recomponer los sistemas de gobernabilidad local a través de la incorporación de nuevos integrantes de la sociedad civil en los estamentos de vigilancia ciudadana, implementación de comités locales de ejecución y vigilancia de obras, entre otras acciones necesarias para recuperar la decencia en el manejo del gobierno local pacaipampino.

Recordar que hay otros expedientes en curso que deberían, en forma sumaria, acumularse para impedir que quienes han hecho tabla rasa de los principios que rigen la ejecutoría de un buen gobierno paguen drásticamente sus lamentables inconductas. Pacaipampa, Ayabaca, Piura y el Perú lo necesitan: que todo el peso de la ley y la voluntad recta de la justicia recaiga sobre quienes pretendiendo impunidad a cambio de dinero, hacen de las suyas con el dinero de todos los peruanos.