martes, 12 de noviembre de 2013

EL VENENO DEL PODER




Érase una vez, en un apartado pueblo de la aldea global que cada día nos soporta menos porque cada día la agredimos más, donde un grupo de jóvenes inteligentes decidieron reunirse para iniciar una cruzada local para lograr que la gente de su apartado pueblo entendiera que no podían seguir viviendo tan irresponsablemente y que si querían podían empezar a adquirir algunos hábitos sencillos pero muy importantes para la conservación de la naturaleza, la madre naturaleza.
Muy entusiasmados, convocaron a otros jóvenes inteligentes, los cuales, después de las sencillas pero inteligentes explicaciones de los convocantes, pasaron a formar parte de este gran grupo de jóvenes inteligentes de este apartado pueblo de esta aldea global que cada día nos soporta con más dificultad debido a la intensa campaña de agresión que llevamos a cabo contra ella con un programa de contaminación que si estuviera planificado por nuestros eruditos planificadores estatales o por nuestros congresistas no funcionara tan excelentemente.
Resulta que en ese apartado pueblo de nuestra aldea global, por ese fenómeno que se le denominó neoliberalismo, el estado del país al que pertenecía ese apartado pueblo y cuyo presidente era un dictadorzuelo disfrazado de demócrata, otorgó una concesión minera haciendo una leguleyada de Padre y Señor Mío, leguleyada que dio origen al rechazo de las comunidades de aquel apartado pueblo de la aldea global.
El grupo de jóvenes inteligentes se sumó a la propuesta de las comunidades y tuvo un papel decisivo en la resistencia al embate, primero de la empresa cuyo nombre era JAMAZ, avalada por el gobierno del dictadorzuelo y luego  a los emvates de los sucesivos gobiernos del país al que pertenecía el apartado pueblo.
Fue tanta la resistencia de las comunidades del apartado pueblo al que pertenecían los jóvenes inteligentes y de otros apartados pueblos circunvecinos potencialmente afectados por una explotación minera a tajo abierto en ciernes, que el trabajo concertado en el que la organización de jóvenes inteligentes tuvo una activa participación, que se logró llevar a cabo una consulta popular (con la participación de veedores internacionales) en la cual el 98% de los consultados (ciudadanos y ciudadanas debidamente acreditadas) se manifestaron en contra de la presencia de la empresa minera JAMAZ en los pueblos apartados potencialmente afectados por la explotación en ciernes.
No mucho tiempo después, en el apartado pueblo, como en todo el país al que este apartado pueblo pertenece, se convocó al proceso electoral municipal y como no podía ser de otra manera, las comunidades y organizaciones que habían luchado por la defensa del medio ambiente establecieron la necesidad de participar con un candidato propio que garantizara la continuidad de la defensa que se había llevado a cabo, no sin cruentos acontecimientos como la pérdida de vidas por parte de los defensores. Y así fue.
Llegado el momento de la verdad, y después de haber trabajado una campaña electoral con franciscano soporte económico pero con una entrega y voluntad a toda prueba, la victoria llegó y el gobierno local de ese apartado pueblo se instaló, ratificándose en el discurso inaugural de la nueva gestión municipal, todas aquellas propuestas que se habían enarbolado en la campaña.

De aquel feliz acontecimiento han pasado ya casi 35 meses y hoy aquel grupo de jóvenes inteligentes que lograron acuñar ese emblemático nombre del que se sentían orgullosos y que tantas satisfacciones les prodigó (Asociación de Jóvenes por un Mundo si Contaminadores Ni Corruptos), es, apenas: un lindo recuerdo. Algunos de sus miembros entraron a trabajar en la nueva gestión municipal y la miopía política de los decisores políticos municipales los convirtió  en los operadores burocráticos de tareas intrascendentes; a otros los expulsó cuando trataron de que se sacudiera de su miopía,  y a otros los convirtió en sus incondicionales ayayeros y hasta proveedores, alejándolos para siempre de aquella visión juvenil que propugnaban para remozar el mundo y hacerlo más vivible. Parecida suerte han corrido algunos dirigentes de las otras organizaciones que encumbraron a quienes hoy en el poder han olvidado sus compromisos primigenios  porque, tal vez, han asumido otros, mucho más lucrativos, pero que nada tienen que ver con los sueños que animaron a estos jóvenes inteligentes, cuya organización, el veneno del poder terminó por arruinar.


P.D. Sabes Freddy que soñamos juntos con hacerla más grande y  me duele estar hoy escribiendo el testamento de sus tempranas exequias. Un abrazo de doliente hermano. Promesa cumplida.

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